Los Pioners de L’Hospitalet quedaron apeados contra todo pronóstico de la final de la Copa de España, tras perder contra los Dracs de Badalona por un ajustado 9-7. No fue, sin duda, un buen día para el ataque ribereño. La buena defensa de Badalona, los errores propios y el exceso de penalizaciones pitadas en contra (cerca de las 200 yardas) en la mayoría de jugadas de consecución de primer down, hicieron misión prácticamente imposible el avanzar el balón.
Precisamente sería una falta pitada al ataque ribereño dentro de la endzone, la que daría la ventaja a los Dracs mediante un safety. La baja de Albert Fernández en defensa fue bien suplida, controlando en todo momento al ataque rival. Pero el ataque tenía demasiados problemas para mover el balón. A pesar de ello, Ramón Figueroa #13 conectaba con Rafa Todolí #28 en la end zone para poner a Pioners por delante en el marcador; Sergio Vélez #84 anotaba el punto de chut.
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Ya en la segunda parte, el corredor turco de Dracs, Saygun Ofluoglu #32, conseguía quitarse de encima todos los placajes y anotaba un touchdown; Xavi Gonzalo #13 anotaba el punto adicional. Vélez tendría la posibilidad de anotar mediante un field goal, pero éste era blocado, con lo que el marcador ya no se movería hasta el final del partido.
De esta forma, Pioners se pierde la que habría sido su quinta final de Copa consecutiva, todo un récord a nivel nacional. Habrá que esperar a otra vez.